Cada vez más organizaciones optan por implementar ISO 14001 a nivel global. Las razones son varias, pero la principal es que la visión sobre la Gestión Ambiental ha cambiado de forma radical en este siglo.

El cuidado del medio ambiente ha dejado de ser un asunto de imagen o una tendencia, para convertirse en un tema de supervivencia. El objetivo ahora va más allá de detener el deterioro del planeta: se busca revertir los efectos de la industrialización y el consumo excesivo.




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Implementar ISO 14001 y reducir el consumo energético, entre otras ventajas, supone una fuente de creación de valor y de competitividad para la organización. Una forma de operar de forma limpia y amigable con el planeta, sin sacrificar la calidad y extensible a toda la cadena de suministro.

Cuanto más rápido se haga, mejores y más oportunos resultados se obtendrán. Por eso es bueno conocer el camino más rápido para implementar ISO 14001 y llegar a la certificación del Sistema de Gestión Ambiental.

¿Cómo implementar ISO 14001?

Las organizaciones optan por implementar ISO 14001 sobre otros estándares de Gestión Ambiental por la estructura de Alto Nivel que también está presente en estándares tan conocidos como ISO 9001 o ISO 45001.

El Anexo SL, que es el eje de la estructura común de Alto Nivel, hace que los pasos de implementación sean similares. Entonces, organizaciones que ya hayan adoptado ISO 9001, ISO 45001, ISO 27001 o ISO 37301, tendrán menos obstáculos para implementar ISO 14001.

Para todas las organizaciones, estos pasos guiarán a los profesionales designados por el camino de la implementación:

1. Obtener el aval de la Alta Dirección

El liderazgo de la Alta Dirección es indispensable para implementar ISO 14001. Y lo es porque es la Alta Dirección quien asigna los recursos que requiere el proyecto, y porque es un requisito de la norma.

2. Elaborar un análisis de brechas

Las organizaciones que se aprestan a implementar ISO 14001 ya han avanzado en procesos, procedimientos o iniciativas parar minimizar su huella ambiental. Algunos de estos elementos satisfacen requisitos de la norma. El análisis de brechas establece cuáles son y qué falta para alcanzar la conformidad total.

3. Definir las partes interesadas

Las partes interesadas son todas aquellas personas, organizaciones, organismos o agrupaciones de personas que tienen interés en las acciones que toma la organización para proteger el medio ambiente, o se ven impactados, de forma positiva o negativa, por esas acciones o la falta de ellas. Los empleados, los clientes, la comunidad, los gobiernos, los organismos reguladores, los socios e inversionistas, son, entre otros, partes interesadas en ISO 14001.

4. Definir el alcance

El alcance puede ser geográfico (ubicaciones, sucursales, países), o basado en procesos (áreas, departamentos, niveles) o por líneas de productos. En cualquier caso, es siempre recomendable que el Sistema tenga alcance sobre toda la organización, incluidas las áreas administrativas como Recursos Humanos, Contabilidad o Financiera.

5. Asignar responsabilidades

Al implementar ISO 14001 y después, cuando el trabajo sea mantener y mejorar el Sistema, es preciso asignar tareas y responsabilidades. En organizaciones de gran tamaño, es probable que exista un equipo de profesionales dedicado. En pequeñas y medianas empresas las tareas se sumarán a las actividades cotidianas de los empleados designados, los cuales, si no es esa su área de especialización, pueden necesitar programas de formación sobre gestión ambiental.

6. Redactar las políticas y establecer los objetivos del Sistema

Políticas y objetivos ambientales son requisitos de la norma. Las políticas expresan el compromiso de la Alta Dirección con la Gestión, y lo que se espera de la implementación de ISO 14001. Los objetivos, en este caso generales, que deben ser dosificados más adelante con objetivos específicos de corto plazo.

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7. Mapear los procesos

Los procesos conforman la estructura operativa del Sistema de Gestión Ambiental. Se componen, a su vez, por procedimientos los cuales incluyen tareas o actividades. Es un entramado que requiere ser mapeado para entenderlo, saber en qué puntos se requerirán recursos (humanos, tecnológicos, de formación o financieros) y de qué forma interactúan estos procesos entre ellos. Un acertado mapeo de procesos aportará una comprensión total y clara del Sistema y su funcionamiento.

8. Elaborar los documentos requeridos

En este punto es necesario elaborar los documentos iniciales solicitados por ISO 14001, de los cuales ya se avanzó con las políticas. Además de redactar procedimientos, informes y listas de verificación, es preciso definir un proceso de documentación eficaz, para la documentación que requiere el sistema en adelante, y que no se puede adelantar ahora, porque se basa en el acontecer futuro de la Gestión. Automatizar la Gestión, con base en una plataforma que cuente con funcionalidades de creación y almacenamiento seguro de documentos, es una buena idea.

9. Compartir el proyecto con los empleados

Los empleados serán un elemento funcional importante para el buen desempeño del Sistema. Algunos de ellos tendrán responsabilidades específicas y otros no. Todos necesitan saber de qué se trata el proyecto, cómo se desarrollará, quiénes serán los líderes… Pero también, los empleados necesitan entender que se trata de un objetivo y una decisión de la Alta Dirección.

10. Identificar riesgos y oportunidades

El objetivo esencial de implementar ISO 14001 es controlar los riesgos ambientales, minimizarlos, eliminarlos o compartirlos. En algunos casos habrá oportunidades para aprovechar. Todo el trabajo debe documentarse y deben diseñarse e implementarse los procesos necesarios para que la Gestión de Riesgos se desarrolle de forma sistemática en el futuro.

11. Preparar la evidencia

El primer hito en la historia de un Sistema de Gestión es la obtención de la certificación. Y la certificación se obtiene proporcionando evidencia del cumplimiento de los requisitos de ISO 14001. La evidencia aparece en documentos, registros, información almacenada en diferentes formatos, pero también en la ejecución diaria de procedimientos y procesos.

12. Practicar auditorías internas

Una organización puede decidir implementar ISO 14001 pero no ir hasta la certificación. Sin embargo, si ya se llegó hasta este punto, ¿por qué no conseguir la acreditación? La certificación la entrega un organismo certificador tras practicar una auditoría de terceros. Practicar auditorías internas ayuda a la organización a prepararse para ese evento, detectar problemas antes de que los encuentre el auditor de certificación, establecer puntos de mejora y, en resumen, poner la máquina a punto para la gran inspección.

13. Revisar y corregir

La Alta Dirección, los auditores internos, los profesionales con responsabilidades en el Sistema, revisan los resultados de las evaluaciones y auditorías y planifican acciones correctivas para solucionar los problemas antes de la auditoría de certificación.

14. Programar la auditoría de certificación

En la práctica, la auditoría de certificación se puede solicitar antes de practicar las auditorías internas. Los organismos tienen agendas apretadas y suelen asignar citas para tres o más meses. En cada país existen dos o tres organismos autorizados para certificar estándares ISO. Los costes, la exigencia de los auditores, la prontitud con la que practiquen la auditoría son elementos importantes en la toma de la decisión.

15. Auditoría de certificación

Si la organización quiere certificar su sistema de gestión ambiental, el ideal es aprobar y obtener la certificación en el primer intento. Sin embargo, el auditor puede encontrar alguna no conformidad, un hallazgo menor o un problema que tendrá que ser solucionado en una nueva auditoría. Estos casos son usuales y no significan que el trabajo no haya sido correcto.

Muchas organizaciones incorporan tecnología una vez el Sistema ha sido certificado. Otras, apuestan al éxito desde la etapa de implementación, adoptando soluciones para automatizar y digitalizar la Gestión. La formación, por otra parte, es un elemento fundamental desde el inicio del proyecto.

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Cursar un Diplomado en Gestión Ambiental ISO 14001 es una decisión estratégica para profesionales y organizaciones comprometidas con la sostenibilidad. Este programa ofrece una comprensión integral de los principios y prácticas de gestión ambiental, permitiendo a los participantes desarrollar las habilidades necesarias para diseñar, implementar, auditar y mantener sistemas de gestión ambiental efectivos.

Con el aumento de la conciencia ambiental y la creciente regulación en este ámbito, contar con expertos en ISO 14001 es esencial para minimizar impactos negativos en el entorno, mejorar la eficiencia operativa y fortalecer la reputación y competitividad de una organización en un mundo cada vez más preocupado por la responsabilidad ambiental.

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