La sociedad cada día es más exigente con los productos que consume, exigen calidad en dichos productor, por lo que las empresas se sienten presionadas a implantar Sistemas de Gestión de Calidad.
La implementación con la norma ISO 9001 es una de las herramientas de las que disponen las empresas, esta norma le ofrece un valor añadido a la organización viéndose reflejada en sus clientes.
Para definir el procedimiento de auditoría según la norma ISO 26000, tenemos que saber que debe contar con un mínimo de contenidos con los que se puede gestionar la auditoría interna en una empresa.
La norma ISO 27001 es un estándar internacional que facilita a la empresa que decida implantar la seguridad, integridad y confidencialidad de los datos personales, de toda la información de la que dispongan, así como de los Sistemas de Gestión con los que cuenten.
Los auditores deben presentar ciertas cualidades personales, además de conocimientos de las siguientes áreas:
Principios, procedimientos y técnicas de auditoría: esto permite al auditor aplicar los que sean apropiados en las diferentes auditorías que pueda realizar, asegurándose de que las auditorías se llevan a cabo de una manera eficiente. El auditor debe tener la capacidad de:
La mejor forma de prestar protección a los trabajadores y a las propias empresas es con la noma OHSAS 18001, ya que permite definir y establecer un Sistema de Seguridad y Salud en el Trabajo.
Las empresas deben realizar auditoría internas dentro de un intervalo de tiempo que siempre deben están planificados, con esto se consigue determinar si el Sistema de Gestión de Responsabilidad Social tiene que ser conforme a los requisitos planificados para la responsabilidad social, para los requisitos del documento y para los del Sistema de Gestión de RSC que se encuentren establecidos en la empresa. Con esta auditoría también se conoce si se ha implementado y se mantienen de una forma eficaz.
La norma ISO 9001 ofrece una mejora a las empresas relacionadas con el sector de la construcción, ya que las hacen más competitivas respecto de otras empresas del mercado que no dispongan de dicha norma, además de aumentar el mercado donde pueden interaccionar.
Los que se encargan de transmitir confianza y fiabilidad durante el proceso de auditoría, son los propios auditores. Por lo que deben contar con la experiencia suficiente como para transmitir dicha confianza a los clientes, ya que es un factor clave a la hora de que el resultado de una auditoría sea satisfactorio. Deben demostrar las siguientes competencias básicas:
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