En años recientes, cada vez más organizaciones intentan alcanzar altos estándares de calidad basándose en la norma internacional ISO 9001. ISO 9001 y el trabajo en remoto plantean un desafío adicional ahora, cuando la reactivación económica no prescinde de una práctica laboral en la que organizaciones y trabajadores encuentran interesantes beneficios.

Para hacer que funcione ISO 9001 y el trabajo en remoto es importante saber que no se contraponen. Tampoco es preciso sacrificar una en beneficio del otro, ni “conciliar” para mantener dos elementos que, sin duda, ofrecen interesantes ventajas competitivas a la organización.




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La discusión resulta muy interesante por cuanto el número de empleados que trabajan desde casa, al alza como consecuencia de la emergencia sanitaria, no se espera que experimente un descenso significativo en los próximos años, conforme se alcance una nueva normalidad.

ISO 9001 y el trabajo en remoto pueden coexistir sin problemas. En las mismas cláusulas del estándar encontramos la fórmula para hacerlo.

ISO 9001 y el trabajo en remoto – Las cláusulas que aseguran el cumplimiento

Bien sea que el teletrabajo se convierta en una opción permanente para muchos trabajadores o que sea en adelante una modalidad de trabajo intermitente, la relación entre ISO 9001 y el trabajo en remoto no puede dejar de considerar el cumplimiento como objetivo principal.

La pregunta, por supuesto, es ¿cómo hacerlo? Anticipamos la respuesta en la introducción de esta entrada, la clave está en tres cláusulas de la misma norma:

Infraestructura – Clausula 7.1.3

La cláusula 7.1.3 de ISO 9001 nos dice cómo debemos gestionar la infraestructura, la misma que la organización debe definir, proporcionar y mantener. Pero, ¿qué es infraestructura dentro del contexto de una norma ISO?

Para ISO 9001, o para otra norma que adopte la estructura de Alto Nivel, infraestructura es todo el conjunto de equipos, máquinas, software e, incluso, servicios, que se utilizan para la producción del bien o del servicio.

La infraestructura incluye edificios, por supuesto. Entonces, las diferentes ubicaciones que se incorporan a la operación, cuando existen trabajadores desde casa, se suman a esa infraestructura.

¿Esto implica que los riesgos aumentan? No exactamente. Lo que aumenta es el alcance de la gestión de riesgos. Y aumenta no solamente cuando pensamos en ISO 9001 y el trabajo en remoto. El alcance es igualmente más amplio para la gestión de seguridad de la información, de la seguridad y salud en el trabajo o de la gestión ambiental, por ejemplo.

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Entorno de trabajo – Cláusula 7.1.4

La cláusula 7.1.4 tiene por objetivo asegurar que las condiciones en las que se lleva a cabo la operación son adecuadas y óptimas. Pero también se necesita que el trabajador realice su trabajo en un ambiente tranquilo y cómodo, de tal manera que, además de garantizar su seguridad y su salud, se puedan alcanzar los objetivos de calidad propuestos.

Esto implica controlar tres tipos de factores:

  • Los de orden social.
  • Los de orden psicológico.
  • Los de orden físico.

Nuevamente, encontramos aquí una relación directa con la seguridad y la salud en el trabajo. Pero es preciso enfocar el requisito en el alcance de los objetivos de calidad. Ciertamente, este punto entraña una dificultad seria en la que deben trabajar de forma metódica los equipos de calidad: controlar los elementos que conforman el entorno de cada uno de los trabajadores, en cada uno de sus hogares.

Una forma de hacerlo puede ser establecer un tipo de entorno ideal, que pueda ser replicado en cada hogar, mediante la comunicación y el apoyo educativo. Acciones que se toman sobre el trabajador para que impacten en su núcleo familiar.

Comunicación – Cláusula 7.4

De las exigencias planteadas en las dos cláusulas anteriores se infiere la importancia del requisito de comunicación. Es claro que el trabajo a distancia depende aún más de canales eficaces de comunicación, pero también de la capacidad que tengan los profesionales en el área de calidad para comunicar de forma acertada y asertiva el mensaje adecuado.

Los canales de comunicación, en un modelo de trabajo que incluya ISO 9001 y el trabajo en remoto, deben considerar la comunicación entre los superiores y sus subordinados, pero también lo contrario y la comunicación entre trabajadores, con clientes, con proveedores y con todas las partes interesadas.

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