La adopción de un enfoque basado en riesgos es un concepto que ha venido sonando con mayor frecuencia últimamente. El motivo de esto, es porque con la revisión de 2015 de la norma ISO 9001, se ha reforzado la importancia que las organizaciones deben conceder a la gestión de los riesgos a los que se enfrentan.
Enfoque basado en riesgos y acción preventiva son dos términos relacionados que han cambiado a medida que se ha ido revisando la ISO 9001. Vamos a analizar las diferencias que hay entre enfoque basado en riesgos y acción preventiva.
El enfoque basado en riesgos es una de las principales novedades que introduce la versión de 2015 de la norma de Calidad ISO 9001. Con este nuevo enfoque, se busca que las organizaciones adapten sus Sistemas de Gestión de la Calidad y procedimientos para tener en cuenta los posibles problemas o riesgos con los que se pueden encontrar en sus procesos o productos/servicios.
ISO 9001:2015 se publicó en septiembre de este año, y entre las novedades encontramos una que destaca especialmente: el pensamiento basado en riesgos ISO 9001.
Este elemento está introducido en cláusulas como el enfoque a procesos, el liderazgo, y sobre todo en la número 6 denominada planificación.
El pensamiento basado en riesgos ISO 9001 es una novedad relativa. Digo lo de relativa porque las organizaciones vienen gestionando sus riesgos desde sus orígenes, es algo que forma parte de su trabajo diario.
El pensamiento basado en riesgos ISO 9001 debería ser un elemento esencial en cualquier negocio, ya que en todos existen riesgos.
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